Llevo tiempo armándome de fuerzas para escribir algo sobre los huracanes. He estado buscando fotos, etc, pero mi preocupación por el estado del país, y la llegada constante de nuevos meteoros a Cuba, me iban dejando cada vez más sin tiempo y sin deseos para reflejar de alguna forma lo que estaba viviendo mi país.
Dejo esta entrada más como recuerdo de un verano para olvidar. La isla está muy dañada a lo largo y ancho de su territorio. Será muy difícil superar tanto destrozo, tantas y tantas casas destrozadas, tanta cosecha perdida.

Nosotros los cubanos tenemos costumbre de huracanes, pero no tenemos costumbre de que nos pasen tan seguidos y que sean estos, tan caprichosos y destructivos.
TADEO